La realización del abono hogareño es una de las mejores formas de contribuir con la disminución de basura y, al mismo tiempo, contar con un abono de muy buena calidad y a precio $0! Basta de chácharas y vamos al grano entonces!
Cómo elaborar tu propio abono compuesto:
A continuación te explicamos qué tipo de abonos podés realizar según la disponibilidad de espacio que tengas en tu casa:
- Abono de superficie: tomar pasto, resto de cosechas, hojas secas, paja y se aporta como mantillo en los canteros de la huerta. Ayuda a mantener la humedad y evitar la erosión de la tierra por el impacto de la lluvia, dificulta el crecimiento de malezas y permite que se cobijen insectos beneficiosos y sapos ya que mantiene la frescura de la huerta. Sin embargo no tiene la efectividad del abono verde o del compuesto en cuanto a la nutrición de la tierra.
- Abono verde: se pican restos orgánicos y se mezclan con la tierra de cultivo, en los canteros. Luego se siembra o bien se trasplanta el plantín. Los restos orgánicos se irán descomponiendo mientras la planta crece, aportando nutrientes.
- Abono compuesto: es la mezcla de restos orgánicos y tierra. Este tipo de abono es ideal para reducir la basura orgánica de tu hogar ya que podés juntar a diario restos orgánicos y sumarlos a "la compostera". Asimismo te dará abono durante todo el año pudiendo utilizarse tanto para realizar los almácigos como para aportar nutrientes a la tierra a medida que las plantas crecen o bien al realizar el cambio de temporada, reforzando la tierra de los canteros, lo cual mejora la estructura del suelo (aumenta la porosidad por lo tanto la permeabilidad así como la capacidad de retención de la humedad) y aumenta el rendimiento y calidad del cultivo (se estimula la microfauna del suelo, la germinación de las semillas, etc.
Qué es el compost?
Es el mecanismo natural por el cual se transforman los restos de comida orgánica en tierra negra que podrá utilizarse para abonar la huerta.
Si no tenés lombrices para que se alimenten de tu compostera no te alarmes! Los principales responsables de compartir esta "basura" en tierra son microorganismos y viven en el suelo, no vas a necesitar buscarlos, ellos van a encontrar tu compostera y se encargarán de transformar todo! Obviamente, si podés complementar con lombrices, ya sean estas de jardín o las californianas (se recomiendan por su rápida reproducción) mejor ya que se aumenta la eficiencia al combinar con la lombricultura!
Pero no es todo taaaaan sencillo, hay que proporcionarles ciertas condiciones a saber:
- Alimento: si, es obvio no? Se debe sumar alimento regularmente para que pueda transformarse en tierra. Qué restos orgánicos pueden sumarse? Cáscaras de huevo (picada), frutas y verduras (salvo los cítricos porque alteran el ph), restos de verduras (que no hayan sido condimentadas), yerba, té, café, pasto, resto de podas, hojas, bosta de caballo, cabra, obeja y todo animal herbívoro, guano de gallina, conejo. No pueden ponerse huesos, carnes, grasas, plásticos, vidrios, latas, excrementos de perros, gatos o humanos (si, si, hay que aclararlo por las dudas).
- Humedad: al igual que los almácigos o las plantas, el abono debe mantenerse con humedad para que tanto los microorganismos como las lombrices puedan vivir. Pero ojo! No debe encharcarse! Cómo saber si está bien la humedad: tomar un poco de compost (tierra negra) y apretarlo, al abrir la mano si el montículo de tierra se desgrana es que le falta agua, si se chorrea es que le sobra, si se mantiene compacto estás por el buen camino!
- Aire: es importante no apretar los restos orgánicos porque le quitamos el aire a los microorganismos, lo cual necesitan para vivir. El poner ramas en el compost ayudará a que no se apelmace, también es importante removerlo de vez en cuando, sobre todo si lo armás en tacho grande, de forma de asegurar una correcta circulación del aire.
- Temperatura: la temperatura ideal que deberá tener la compostera es entre 18 y 25 grados, por eso es importante armarla en un lugar con reparo de los vientos fríos del invierno, acceso al sol pero que no le de de pleno en verano porque aumentará la temperatura matando a todos los microorganismos.
Tipos de compostera/abonera:
Compostera de tacho |
- Compostera de pila: Se recomienda para zonas lluviosas ya que se hace directamente en el suelo, apilando los restos orgánicos en diferentes capas como por ej: restos vegetales + restos de poda + estiércol + tierra, y así sucesivamente. Se debe regar para mantener la humedad y proteger con algún elemento ya sea maderas, un plástico, una chapa para evitar que las lluvias lo inunden y que se erosione con los fuertes vientos.
- Compostera en pozo: Se recomienda para zonas secas, áridas o muy frías, ya que permite conservar mejor la humedad. El concepto es el mismo que en la compostera de pila.
- Compostera en tacho: Es es estilo de abonera que tenemos en casa dado que no contamos con espacio como para hacerla en el suelo y además, el tener perros y una gata nos obliga a tener algo más controlado, prolijo y aislado de ellos. Es ideal para zonas urbanas porque evita la aparición de roedores. Como su nombre indica, se realiza utilizando un tacho grande, es recomendable uno de 200lts, puede ser un tanque de agua viejo, quebrado. Se quita la tapa y el fondo o bien, como hicimos nosotros, sin sacar el fonde le hicimos una puertita frontal bien abajo del tacho por la cual sacamos el compost cuando está listo. Se coloca sobre ladrillos para que no quede en contacto con el suelo. Si preferís sacarle el fondo debrás colocarle maderas abajo por donde extraerás el abono. Al igual que las otras composteras, se deberá ir sumando capas de restos orgánicos y tierra (es importante cubrir con tierra para que no se llene de bichos) y contar con una tapa para los días de lluvia.
Listo! Ya tenés toda la información para iniciar tu propia abonera. Manos a la obra entonces!
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